Introducción:
DESARROLLO PSICOMOTOR
MOTRICIDAD GRUESA Y FINA
El desarrollo motor de los niños depende principalmente de la
maduración global física, del desarrollo esquelético y neuromuscular. Los
logros motores que los niños van realizando son muy importantes en el desarrollo
debido a que las sucesivas habilidades motoras que se van a ir adquiriendo
hacen posible un mayor dominio del cuerpo y el entorno. Estos logros de los
niños tienen una influencia importante en las relaciones sociales, ya que las
expresiones de afecto y juego se incrementan cuando los niños se mueven
independientemente y buscan a los padres para intercambiar saludos, abrazos y
entretenimiento.
En el desarrollo motor pueden establecerse dos grandes categorías:
1) motricidad gruesa (locomoción y desarrollo postural), y 2) motricidad fina
(prensión). El desarrollo motor grueso se refiere al control sobre acciones
musculares más globales, como gatear, levantarse y andar. Las habilidades
motoras finas implican a los músculos más pequeños del cuerpo utilizados para
alcanzar, asir, manipular, hacer movimientos de tenazas, aplaudir, virar,
abrir, torcer, garabatear. Por lo que las habilidades motoras finas incluyen un
mayor grado de coordinación de músculos pequeños y entre ojo y mano. Al ir
desarrollando el control de los músculos pequeños, los niños ganan en
competencia e independencia porque pueden hacer muchas cosas por sí mismos.
Hasta los 3 años los aspectos más relevantes en relación al
desarrollo psicomotor están relacionados con los desplazamientos corporales y
la impulsividad de los movimientos por una insuficiente regulación del freno
inhibitorio.
A partir de esta edad hay una progresiva equilibración de los
movimientos, se eliminan gradualmente las asociaciones o sincinesias y se va
marcando progresivamente la independencia segmentaria. Todo ello da lugar a una
mayor precisión del dinamismo manual, a la aparición de gestos más
diferenciados y al perfeccionamiento de la coordinación óculo-manual.
ASPECTOS DEL DESARROLLO PSICOMOTOR
El término psicomotricidad tiene dos acepciones básicas. Para algunos,
como García y Martínez (1991), la psicomotricidad supone la interrelación entre
las funciones neuromotrices y las funciones psíquicas en el ser humano. Para
otros, hace referencia al conjunto de técnicas encaminadas a un desarrollo
global que, partiendo de la educación del movimiento y gesto, posibilite
alcanzar la función simbólica y la interacción correcta con el medio ambiente.
En la actualidad la psicomotricidad contempla ambas acepciones. Basándonos
fundamentalmente en los trabajos de Cobos (1999) y Picq y Vayer (1977)
exponemos aquí aquellos aspectos del desarrollo psicomotor que son la base de
los aprendizajes escolares. Estos aspectos son los que han generado más
investigación, mayor número de programas y estrategias de intervención.
ESQUEMA CORPORAL
Según Ballesteros (1982), este concepto se puede definir como la representación
que tenemos de nuestro cuerpo, de los diferentes segmentos, de sus
posibilidades de movimiento y de acción, así como de sus diversas limitaciones.
Es un proceso complejo ligado a procesos perceptivos, cognitivos y práxicos,
que comienza a partir del nacimiento y finaliza en la pubertad, interviniendo
en el mismo la maduración neurológica y sensitiva, la interacción social y el
desarrollo del lenguaje.
Las experiencias producidas por el movimiento, los resultados de dicho
movimiento y la percepción del cuerpo de otros sientan las bases sobre las que
se va a elaborar la percepción del cuerpo propio. Durante el segundo año de vida
el niño manifiesta una progresiva diferenciación de algunas partes del cuerpo y
en el tercero, los niños son capaces de identificar ojos, boca, orejas, nariz,
manos, brazos, pies y piernas.
El lenguaje va a jugar un papel esencial en la construcción del esquema
corporal, ya que además de permitir nombrar las partes que componen el cuerpo,
como regulador de las secuencias de actos motores en la interacción con el
ambiente a través del juego. La representación corporal hace posible la
utilización del cuerpo de forma coordinada mediante el ajuste de la acción a lo
que se quiere o desea.
Entre los 2 y 5 años los niños van mejorando la imagen de su
cuerpo y los elementos que lo integran, van perfeccionando movimientos, estabilizando
su lateralización y conquistando el espacio, relacionándose y actuando en él.
Aunque entre 5 y 6 años el esquema corporal es bastante bueno en cuanto a la
calidad de los movimientos y a la representación que se tiene del mismo,
todavía se deben dominar conceptos espaciotemporales que permitan situarse
adecuadamente en el espacio, en el tiempo y con relación a los objetos.
Se considera que un niño presenta un retraso en la elaboración del
esquema corporal si a los 3 años no es capaz de reconocer, señalando o nombrando,
los elementos de la cara, o si a los 6 no lo reconociera en sí mismo o no
pudiera representarlo, además es esperable que a esta edad los niños distingan
su derecha e izquierda y conozcan algunos conceptos espacio-temporales
sencillos como arriba/abajo, delante/detrás, primero/último, ayer/mañana, etc.
El cuerpo humano aunque a nivel anatómico es
simétrico, a nivel funcional es asimétrico. El término lateralidad se refiere a
la preferencia de utilización de una de las partes simétricas del cuerpo
humano, mano, ojo, oído y pie. El proceso por el cual se desarrolla recibe el
nombre de lateralización y depende de la dominancia hemisférica. Así, si la
dominancia hemisférica es izquierda se presenta una dominancia lateral derecha,
y viceversa. El que una persona sea diestra o zurda depende del proceso de lateralización.
Se considera que un niño está homogéneamente lateralizado si usa de forma
consistente los elementos de un determinado lado, sea éste el derecho (diestro)
o el izquierdo (zurdo). Cuando la ejecución de un sujeto con una mano sea tan
buena como con la otra se le denomina ambidextro.
Mora y Palacios (1990) establecen que la lateralización se produce
entre los 3 y los 6 años.
Si un niño de 5 años no tiene todavía definida su dominancia
lateral, especialmente, la referente a la mano, es necesario reconducir la
misma hacia el lado o mano con la que el sujeto se muestre más hábil y/o
preciso.
ESTRUCTURACIÓN ESPACIO-TEMPORAL
La orientación espacial implica establecer relaciones entre el
cuerpo y los demás objetos, está asociada al espacio perceptivo e incluye esencialmente
relaciones topológicas. La estructuración del espacio conlleva adquirir
nociones de conservación, distancia, reversibilidad, etc., por lo que se convierte en un proceso largo que se va configurando
desde los planos más sencillos (arriba, abajo, delante, atrás...) a los más complejos
(derecha-izquierda), dándose primero en la acción y pasando posteriormente a
ser representados en uno mismo, en el otro y en el espacio con los objetos.
No hay que confundir la dominancia lateral con discriminar las nociones
espaciales derecha-izquierda en sí mismo o en los otros. El concepto
derecha-izquierda se va configurando entre los 5 y los 8 años. Generalmente los
niños de 6 años tienen adquiridos los conceptos básicos espaciales y la noción
derecha-izquierda sobre sí mismo. La discriminación de la derecha e izquierda
de otro situado enfrente se consigue a partir de los 8 años y la posición
relativa de tres objetos a los 11-12 años.
El conocimiento de estos conceptos es fundamental cara a los aprendizajes
escolares, ya que el desconocimiento de los mismos se relaciona con
alteraciones de la lectura (dislexia), de la escritura (disgrafía) y
dispraxias.
La estructuración temporal tiene 2 componentes principales: el
orden y la duración. El orden permite tomar conciencia de la secuencia de los acontecimientos
y la duración permite establecer el principio y final de los mismos. El ritmo
sintetiza ambos elementos constituyendo la base de la experiencia temporal.
La evolución de la comprensión del orden y la duración tiene lugar
de los 2 a los 12 años. Los niños de 2 a 6 años tienen dificultades para establecer
seriaciones cronológicas y lógicas de los acontecimientos, pero cuando tienen
de 7 a 12 años pueden realizar tareas lógicas que impliquen la conservación, la
reversibilidad y los ordenamientos, lo que va a ayudar a que las nociones
temporales se adquieran completamente.
La íntima relación entre ritmo y motricidad se pone de manifiesto
en el movimiento. Igualmente relacionados están el ritmo y la lectura al principio
de su aprendizaje, ya que ésta requiere que se transformen estructuras
visuales, distribuidas en el espacio, en estructuras auditivas, distribuidas en
el tiempo. Al escribir al dictado se da el proceso inverso, y ambas estructuras
espacio-temporales se integran en el proceso lectoescritor.
Los sujetos dispráxicos presentan grandes dificultades para reproducir
estructuras rítmicas
La coordinación consiste en la utilización de forma conjunta de distintos
grupos musculares para la ejecución de una tarea compleja. Esto es posible
porque patrones motores que anteriormente eran independientes se encadenan
formando otros patrones que posteriormente serán automatizados. Una vez que se
han automatizado determinados patrones la presentación de un determinado
estímulo la secuencia de movimientos, por lo que el nivel de atención que se
presta a la tarea disminuye, pudiendo dirigirse a otros aspectos más complejos
de la misma o incluso a otra diferente.
La coordinación dinámica general juega un importante papel en la mejora
de los mandos nerviosos y en la precisión de las sensaciones y percepciones. La
ejercitación neuromuscular da lugar a un control de sí mismo que se refleja en
la calidad, la precisión y el dominio en la ejecución de las tareas.
Para que el gesto sea correcto es necesario que se den las siguientes
características motrices: precisión ligada al equilibrio general y a la
independencia muscular, posibilidad de repetir el mismo gesto sin pérdida de
precisión, independencia derecha-izquierda, adaptación al esfuerzo muscular,
adaptación sensoriomotriz y adaptación ideomotriz (representación mental de los
gestos a hacer para conseguir el acto deseado). Estas cualidades evolucionan en
función de la madurez neuromotriz y del entrenamiento.
Este concepto hace referencia al grado de contracción de los músculos
pudiendo ir desde la hipertonía (tensión) a la hipotonía (relajación). Está
sometido, en parte, a un control involuntario dependiente del sistema nervioso
y, en parte, a un control voluntario. Se va regulando como consecuencia de
distintas experiencias que se van teniendo en tanto que las mismas exijan un
control del cuerpo para adecuar las acciones a los objetivos. Este aspecto repercute
en el control postural y en el grado de extensibilidad de las extremidades. Es
un factor relacionado con el mantenimiento y control de la atención, las
emociones y la personalidad.
Consiste en la capacidad para controlar por separado cada segmento
motor necesario para la ejecución de una determinada tarea, aspecto que se
espera pueda realizarse correctamente en niños de 7/8 años.
La respiración está vinculada a la percepción del propio cuerpo y
a la atención interiorizada que controla el tono muscular y la relajación segmentaria.
Hay una estrecha vinculación entre respiración y comportamiento. Existe
evidencia de la relación entre el centro respiratorio y partes corticales y
subcorticales del cerebro. La respiración depende del control voluntario e
involuntario y está relacionada con la atención y la emoción. La toma de
conciencia de cómo respiramos y la adecuación en cómo lo hacemos, tanto en lo
referido a ritmo como a profundidad, son los aspectos fundamentales en el
control respiratorio.
Reúne un conjunto de aptitudes estáticas y dinámicas incluyendo el control
de la postura y el desarrollo de la locomoción. Es un paso esencial en el
desarrollo neuropsicológico del niño ya que es clave para realizar cualquier
acción coordinada e intencional. Cuanto menos equilibrio se tiene más energía
se consume en la ejecución y coordinación de determinada acción, por lo que se
acaba distrayendo la atención e incrementándose la ansiedad.
Desarrollo o aplicación del Test:
La aplicación del test, se desarrollo en el ámbito educativo nivel preescolar, en el cual participaron 19 alumnos de 5 años y 1 de 4, con la finalidad de conocer el desarrollo psicomotor que poseen y atender las necesidades pertinentes al grupo.
El test aplicado se describe a continuación:
Test Guestáltico Visomotor BENDER
Autor/es:
Test original: Lauretta Bender
Método de corrección: Elizabeth M. Koppitz
Año Publicación inicial y última revisión:
Instrumento creado por Lauretta Bender entre 1932-1938
Método de corrección según Elizabeth M. Koppitz:
Inicial:
El tests Guestáltico visomotor para niños. Escrito en la década de 1960. En español publicado por Ed. Guadalupe. 6º edición 1976
Actual
El test guestáltico de Bender. Investigación y aplicación 1963 -1973. En español Ed. Oikos Tau
Última publicación sin modificaciones (cambia el título):
El test de Bender. 2ª edición. 1995. Ed. Oikos Tau, serie Oikos Textos . España (Primera edición 1981)
Objetivo de la Técnica :
Test de desarrollo infantil. Evalúa la maduración perceptiva y la integración visomotora e indicadores emocionales.
Puede ser empleado como test proyectivo gráfico en personas mayores e incluso como instrumento de diagnóstico diferencial en psiquiatría.
Origen Conceptual
Teoría de la Guestalt
II) Administración
Población a la que se puede administrar:
1- Niños de 5 a 11 años
Forma de Administración:
Se administra dentro de una batería psicodiagnóstica, tanto clínica como educacional.
a) Individual X Grupal X
b) Material Necesario:
9 láminas que componen el test, hojas A4, lápiz nº 2, goma, sacapunta.
c) Consigna: :
“Aquí hay nueve tarjetas con diseños para que los copies (señalar las tarjetas). Aquí esta el primero ( dar vuelta la primer tarjeta). Ahora, haz uno igual a este”. Otra opcion es “Ahora quisiera que me dibujaras algunos diseños. Aquí hay nueve tarjetas y cada tarjeta tiene un dibujo en ella (señalar las tarjetas). Quiero que copies los dibujos. Hazlos lo mejor que puedas”.
d) Tiempo de Aplicación
La mayoría de los niños de edad escolar necesitan aproximadamente 6 minutos, 20 segundos para completar el test.
III) Corrección:
Descripción del procedimiento
Cada dibujo realizado por el niño es puntuado de acuerdo a las siguientes pautas:
· distorsión de la forma
· rotación de todo o parte del dibujo
· integración de las partes del dibujo no logradas
· perseveración
Son 30 ítems puntuables. La puntuación máxima es de 30 puntos. Se asigna un punto por cada imperfección en la ejecución.
Tiempo de Corrección
30 minutos
IV) Aspectos Psicométricos:
Tipo de Instrumento: (clasificación Collins, Pervin o Pichot)
Test de lápiz y papel
Test Objetivo
Baremos:
a) Muestra de tipificación: La muestra normativa de 1974 estaba compuesta por 975 niños de escuela primaria, entre los 5 y 11 años, 11 meses que vivían en áreas rurales, pueblos pequeños, suburbios y grandes centros urbanos en el oeste, sur y noreste de USA. 86 % blancos, 8,5 % negros, 4.5 % mexicoamericanos y portorriqueños y 1 % asiáticos.
b) Normas
de desarrollo: Edad: EMPM
Fiabilidad
a)de re-test de la puntuación total es de .50 a .90 (Intervalo de aplicación del mismo día hasta 8 meses) Si bien esta confiabilidad no son lo suficientemente altas como para justificar la toma de desiciones diagnósticas, son adecuadas para formular hipótesis acerca de la capacidad visomotora. (Sattler. Evaluación Infantil cap. 14)
d) Del evaluador: van desde .79 a .99 (Sattler. Evaluación Infantil cap 14)
Validez
Cuando se utiliza como prueba del desarrollo precepto-motor en niños parece tener validez aceptable (Sattler. Evaluación Infantil. Cap. 14)
a) Empírica: Concurrente: Con la prueba Frostig del Desarrollo de la Percepción visomotora va de .39 hasta .56 y con la Prueba de Desarrollo de la Integración Visual va de .59 a . 73 (Sattler. Evaluación Infantil. Cap. 14)
FICHAS PARA APLICAR EL TEST:
IMÁGENES
DE LOS NIÑOS QUE SE LES APLICO LA PRUEBA:
A continuación comparto con ustedes las imágenes de los niños que participaron en la aplicación del test, como ya se había mencionado son alumnos de preescolar.
ALGUNAS DE LAS PRUEBAS APLICADAS:
Las siguientes imagenes hacen alusión al test que se le aplico, es necesario recalcar que solo son algunas.
caso 2: niña de 5 años. tímida pero muy trabajadora. presta atención a todo lo que se realiza.
GRÁFICA COMPARATIVA DE LA COORDINACIÓN MOTORA DE LOS NIÑOS DE 2DO. GRADO